Antes que nada, “zzin huwa zzin” (o lo que viene a ser lo mismo, lo que es bello lo es). Las mujeres marroquíes, de norte a sur, podemos estar orgullosas de nuestra exótica belleza, tan natural como diversa. Hermosas mujeres caucásicas de ojos verdes de la región del Rif, y deslumbrantes mulatas de piel tersa y dorada del sur de Marruecos, de mirada misteriosa. Podríamos ser las mujeres más bellas del mundo, sin duda.
Pero este tema no nos atiene en este artículo, sino más bien hasta qué punto el concepto de “belleza” o “físico atractivo” puede jugar en contra de una persona, sobre todo en contra de una mujer (que, según algunas mentalidades retrógradas, el “sexo débil”).
He aquí la noticia de la semana. La polémica. Y es que las mujeres del Golfo Pérsico rechazan tener a una asistenta doméstica que proceda de Marruecos, por ser “ligeras de casco” y unas “robamaridos”. Palabras que, obviamente, hieren la dignidad de cualquier mujer.
Y yo me pregunto: ¿”mea culpa” por parte de jóvenes inexpertas que se buscan la vida fuera de sus hogares? ¿O más bien son los prepotentes dueños de ostentosas moradas los que deberían tener presente la moral y la seriedad ante todo?
En verdad, “bi kul saraha”, creo que no se debe generalizar nunca. Y dicho esto, hay de todo. No todas las chicas entran a trabajar a una casa con intenciones decentes. Y no todos los hombres son unos infieles compulsivos que se arrastran bajo las faldas de cualquier jovencita apetecible. Y hay que aferrarse, más que nada, a la situación social de estas jóvenes que emigran en busca de una vida mejor.
“Voy a ganarme un buen dinero, y de paso, me ligo al marido y me convierto en la señora y dueña de todo, ¡de la nada, tendré una vida mejor!” – pensamiento de algunas. “Necesito este trabajo, sea como sea. Y si el dueño me propone algo… que he de aceptar (porque de lo contrario, me despide), pufff…”ma3andi ma n3mel”, qué remedio” – pensamiento de muchas otras, víctimas de la opresión, del chantaje y de abusos y acoso constantes.
La realidad tiene varias caras. Y algunas caras son bastante duras de presenciar, de observar, de analizar. Varias estadísticas se hacen rutinariamente y religiosamente sobre el tema, sobre maltratos, emigraciones, y un largo etcétera. Pero no se hacen eco de la realidad, aquella que refleja unas historias inimaginables - esas historias escalofriantes y desgarradoras propias de una historia de terror vividas en carne propia por tantas mujeres indefensas -.
Hablando de datos, sólo las familias sauditas numerosas y respetando ciertos requisitos tienen acceso a tener una o varias asistentas domésticas, según el periódico nacional “Okad”.
Y para finalizar, y después de una larga reflexión, el titular es un tanto discriminatorio y racista. Más bien, el mensaje dado por parte de las señoras casadas de Arabia Saudí lo es. Discriminatorio y racista. Cruel e inhumano, añado. Desde mi humilde punto de vista, las mujeres de Oriente deberían unirse por propósitos más elevados – como el respeto por sus derechos y ganarse el respeto de todos, en todo y en cualquier parte-, sobre todo aquellas que gozan de una posición privilegiada en la sociedad. Hay que partir desde lo más bajo, desde cero. Y eso es, ayudar a los más desfavorecidos en vez de pisotearlos.
Artículo escrito por Nour Azuagh
Pero este tema no nos atiene en este artículo, sino más bien hasta qué punto el concepto de “belleza” o “físico atractivo” puede jugar en contra de una persona, sobre todo en contra de una mujer (que, según algunas mentalidades retrógradas, el “sexo débil”).
He aquí la noticia de la semana. La polémica. Y es que las mujeres del Golfo Pérsico rechazan tener a una asistenta doméstica que proceda de Marruecos, por ser “ligeras de casco” y unas “robamaridos”. Palabras que, obviamente, hieren la dignidad de cualquier mujer.
Y yo me pregunto: ¿”mea culpa” por parte de jóvenes inexpertas que se buscan la vida fuera de sus hogares? ¿O más bien son los prepotentes dueños de ostentosas moradas los que deberían tener presente la moral y la seriedad ante todo?
En verdad, “bi kul saraha”, creo que no se debe generalizar nunca. Y dicho esto, hay de todo. No todas las chicas entran a trabajar a una casa con intenciones decentes. Y no todos los hombres son unos infieles compulsivos que se arrastran bajo las faldas de cualquier jovencita apetecible. Y hay que aferrarse, más que nada, a la situación social de estas jóvenes que emigran en busca de una vida mejor.
“Voy a ganarme un buen dinero, y de paso, me ligo al marido y me convierto en la señora y dueña de todo, ¡de la nada, tendré una vida mejor!” – pensamiento de algunas. “Necesito este trabajo, sea como sea. Y si el dueño me propone algo… que he de aceptar (porque de lo contrario, me despide), pufff…”ma3andi ma n3mel”, qué remedio” – pensamiento de muchas otras, víctimas de la opresión, del chantaje y de abusos y acoso constantes.
La realidad tiene varias caras. Y algunas caras son bastante duras de presenciar, de observar, de analizar. Varias estadísticas se hacen rutinariamente y religiosamente sobre el tema, sobre maltratos, emigraciones, y un largo etcétera. Pero no se hacen eco de la realidad, aquella que refleja unas historias inimaginables - esas historias escalofriantes y desgarradoras propias de una historia de terror vividas en carne propia por tantas mujeres indefensas -.
Hablando de datos, sólo las familias sauditas numerosas y respetando ciertos requisitos tienen acceso a tener una o varias asistentas domésticas, según el periódico nacional “Okad”.
Y para finalizar, y después de una larga reflexión, el titular es un tanto discriminatorio y racista. Más bien, el mensaje dado por parte de las señoras casadas de Arabia Saudí lo es. Discriminatorio y racista. Cruel e inhumano, añado. Desde mi humilde punto de vista, las mujeres de Oriente deberían unirse por propósitos más elevados – como el respeto por sus derechos y ganarse el respeto de todos, en todo y en cualquier parte-, sobre todo aquellas que gozan de una posición privilegiada en la sociedad. Hay que partir desde lo más bajo, desde cero. Y eso es, ayudar a los más desfavorecidos en vez de pisotearlos.
Artículo escrito por Nour Azuagh
Leer Más: Dudosa reputación de las marroquíes por parte de Arabía Saudí, calificadas de "robamaridos" - Foro de marroquíes de España http://www.forome.info/2014/06/dudosa-reputacion-de-las-marroquies-por.html#ixzz3w4rw9WtN